Tras años sufriendo fatiga crónica, un hombre ha descubierto que se estaba poniendo la crema de noche durante el día. Xavi Bonet llevaba cinco años con cara de cansado en el trabajo, mientras que se sentía tonificado y fresco como una lechuga en plena madrugada, lo que le provocaba serios problemas para conciliar el sueño.
Después de acudir a numerosos especialistas, que siempre le decían que estaba bien, una mañana se dio cuenta del error. “La piel se me ponía muy bien, pero me entraba un cansancio inmediato”, se sincera. “No caí hasta que me di cuenta de que, durante el desayuno y la ducha previa a echarme la crema, me sentía descansado”, añade. “Me estaba destrozando sin darme cuenta”, dice.
Además del problema con esta crema facial, a Bonet se le cayó hace un mes un poco de crema antiedad en el pene y ahora lo tiene como un niño de siete años. “Se me ha caído hasta el vello púbico, es muy humillante”, explica. “Tengo problemas capilares porque estuve años usando champú para pelo seco sin encender el agua de la ducha”, declara con vergüenza.
El afectado denuncia también que, por culpa del desodorante 24 horas, sus sobacos se han quedado congelados en el tiempo, lo que le provoca sudores fríos.
Visto en: Mundo Today