Después de exigir la dimisión de António Guterres, secretario general de la ONU, por haber proclamado este martes que los ataques de Hamás no vienen “de la nada”, el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha querido alertar a los medios de comunicación de que Hamás «es perfectamente capaz de bombardear la sede de la ONU del mismo modo que bombardeó un hospital en su propio territorio».
«Un grupo terrorista que atenta contra su propia población es muy capaz de acabar con la vida del señor Guterres y con la organización a la que pertenece, quizá para que luego se nos acuse a nosotros de haber perpetrado el ataque», ha explicado Netanyahu. «Son muy capaces, podrían estar preparando ya el bombardeo porque tienen los medios para hacerlo», ha insistido este mediodía.
Israel considera que «sería una pena» que una entidad «tan preciada» acabara «reducida a cenizas», en palabras del primer ministro, quien advierte también de que su país no podría defender a la ONU porque está ocupado defendiéndose de Hamás «y de quienes justifican sus ataques en declaraciones antisemitas».
«Yo, si fuera Hamás, acabaría con la ONU. Si fuera Hamás, insisto. Así que cuidado con lo que se dice y con lo que se hace. Recomendaría un perfil bajo por el bien de todos», ha concluido el líder israelí.
Tras las declaraciones de Netanyahu, la ONU ha emitido un comunicado en el que pide que se respeten los Derechos Humanos que no sean antisemitas.
Visto en: Mundo Today