Pese a que en público ha anunciado que va a «restringir» sus relaciones políticas con el Ejecutivo central hasta que se esclarezcan las denuncias de espionaje a más de 60 independentistas con el programa Pegasus, en la intimidad parece que a Pere Aragonès le da igual porque en sus conversaciones íntimas apenas menciona el asunto, según ha informado el CNI a Pedro Sánchez. «En sus mensajes actuales privados no habla del tema, lo que indica que solo le preocupa de puertas para afuera, por lo tanto no vamos a caer en sus chantajes ni en los ultimátums absurdos que nos están planteando para que investiguemos el caso», ha declarado Pedro Sánchez esta mañana en referencia al escándalo.
Desde que se destapó el «catalangate» hace dos semanas, Pere Aragonès solo se ha referido al tema en tres ocasiones en sus actuales mensajes privados usando sus móviles (el oficial y el privado, ambos pinchados) y en las conversaciones que mantiene en su despacho (pinchado), en su coche oficial (donde hay 13 micrófonos), en su domicilio particular (donde hay 26 micrófonos y 13 cámaras) y en el bar ‘La xal·leta’, donde suele comer (y donde todos los camareros son espías del CNI). El pasado lunes a las 23:04, Pere Aragonès (según se puede ver en unos vídeos difundidos por el CNI) estuvo hablando con su mujer del tema del espionaje, en el dormitorio, justo antes de que ambos se quedaran dormidos, pero se puede apreciar que menciona el tema «de pasada y como algo más de su día a día».
En la última semana, según el CNI, Pere Aragonès no se ha quejado ni una sola vez del espionaje a sus conocidos, lo que deja claro que se le está pasando ya el enfado, por mucho que en la esfera pública exija «depurar responsabilidades».
El Ejecutivo se ha comprometido a seguir monitorizando todas las conversaciones y acciones privadas de los políticos independentistas para asegurarse de que, efectivamente, el tema no les agobia demasiado. «En cuanto veamos que se organizan entre ellos para denunciar al Gobierno o que planean hacer cosas serias, quizá nos toque actuar, por eso seguimos espiándolos, para medir la temperatura del problema y asegurarnos de que, además, están bien en lo personal», ha explicado Sánchez, garantizando que se toma el asunto en serio.
«De hecho, uno de los líderes del procés es, y siempre ha sido, un espía del CNI que ha acabado entablando una amistad íntima con el resto de políticos espiados y nos ha asegurado que a nadie del grupo le preocupa este tema realmente en serio», ha dicho Sánchez, muy tranquilo con las amenazas del Govern.
Según el CNI, el único político independentista actual que parece preocupado por el asunto es Carles Puigdemont, indignado porque ya ni siquiera le espían. Esto lo han podido saber no porque monitoricen sus conversaciones (algo que dejaron de hacer hace dos años) sino porque él mismo está publicando pantallazos de todas sus conversaciones privadas de Whatsapp intentando reclamar interés.
Visto en: Mundo Today